Desde que hace más de un año nos reunimos con Diana y Federico, supimos que la de ellos, sería una boda especial. La locación perfecta, una novia que parece modelo y un novio al que la pasión y la emotividad le sobra en cuantiosas proporciones.  La fórmula ya estaba dada, no podríamos tener menos que una gran boda! Y qué tal boda... Varios invitados vinieron desde lejos, la natal Argentina de Federico, lo que le dio una cuota de inusual exaltación a cada uno de los momentos del día. Durante la fiesta hasta nos olvidábamos que estábamos en una boda y nos parecía estar de pronto en un  concierto o partido de fútbol en algún estadio de Buenos Aires. Y es que si hay algo que saben hacer los argentinos es celebrar. Abrazos, aplausos, carcajadas y hasta lágrimas. Nunca vimos a unos novios volar tantas veces sobre los brazos de sus invitados! Esperamos que su nueva vida juntos esté tan llena de amor vehemente como lo fue su boda. ¡Felicidades Diana y Federico, les deseamos lo mejor! 

Fotos por: Savina y Juan Pablo Aragón